Políticas ecuatorianas de atención priorizada para la prevención del fenómeno de drogas son referente entre países de la Región

La problemática de microtráfico de drogas que altera la vivencia pacífica en el Ecuador, principalmente en las zonas urbanas, promovió la creación del Proyecto de Desarrollo Alternativo Preventivo Urbano, que establece acciones específicas para reducir la relación de la ciudadanía con actividades ilegales relacionadas con  la oferta de drogas en el país. 



Este proyecto, es una alternativa al propuesto por el Programa de Cooperación entre América Latina, el Caribe y la Unión Europea sobre Políticas de Drogas (Copolad) creado en el 2015 y que se basa en la recuperación económica y social de territorios estratégicos con potencial productivo que se han usado para realizar  cultivos ilícitos. 

Al ser, Ecuador, un país que no presenta problemas de territorios destinados al cultivo de sustancias ilícitas, pero que sí evidencia microtráfico en zonas específicas, adaptó este proyecto  para promover actividades sociales, deportivas y culturales en zonas consideradas vulnerables; además,   fomenta la creación de pequeños y medianos emprendimientos como eje para su desarrollo y  como prevención al involucramiento de la población en actividades ilícitas.  

Es la adaptación del Programa de Desarrollo Alternativo Preventivo a la realidad nacional, lo que llamó la atención de los representantes de países como Costa Rica y Guatemala quienes también tienen problemas de microtráfico en sectores urbanos.

Estas acciones convirtieron al Ecuador en un referente regional de atención a la población vulnerable a la relación con la droga según lo destacaron representantes de países como Costa Rica, Guatemala y Colombia, que participaron en el segundo taller del Copolad que se desarrolló en la ciudad de Asunción, Paraguay. La propuesta ecuatoriana promovió que en este segundo taller, los países miembros de la Copolad, trabajen en la creación del Proyecto de Desarrollo Alternativo Preventivo Urbano para la región.

Comentarios